Pablo.
Los machos no dominantes de algunas especies animales lo tienen muy difícil para aparearse, por lo que optan por perseguir o raptar a hembras muy jóvenes, en ocasiones casi recién salidas de la lactancia. Es lo que ocurre, por ejemplo, entre las liebres patagónicas, varias especies de mustélidos y algunos primates. Así, en los grupos de papiotes oliva, los machos se interesan por las hijas preadolescentes de las hembras de menor rango. Los macacos japoneses y los papiones sagrados, por su parte, adoptan crías y las cuidan para ganarse sus favores sexuales cuando alcanzan los dos años..- Todos los capítulos de Tantos hombres y tan poco tiempo