4 / lunes - febrero de 2019

Semana 6. 35/330
Juan de Britto.

Las plumas de ave para escribir se utilizaron durante siglos: constituyeron la principal herramienta de escritura durante más de 1.300 años. No cualquier pluma de ave resultaba apta para la escritura: pronto se determinó una tendencia y predilección por las plumas de ganso. Según los expertos, las mejores eran las provenientes de la punta del ala izquierda de estas aves, dada su curvatura. Otros grupos muy cotizados para la producción de instrumentos de escritura eran los aptos, cisnes e incluso ciervos. Para habilitar las plumas del ave era necesario dejarlas secar para que se endurecieran; concluido este proceso, se usaba el cortaplumas , una navaja pequeña, para tallar la punta del bisel y afilarla. Después de escribir alguna páginas, había que cortar nuevamente la punta con la finalidad de mantener el filo y al forma. Para un escriba afortunado, la pluma podía durar alrededor de una semana.
.- Todos los capítulos de Tantos hombres y tan poco tiempo.