23 / martes - abril de 2019

Semana 17. 113/252
Jorge.

En su origen, la palabra idiota no tenía un significado insultante. Para los griegos, idiota era el hombre privado, en contraposición al hombre público. Se usaba también para significar al individuo excéntrico y huraño que vivía apartado de la sociedad. Poco a poco la palabra adquirió un sentido peyorativo al pasar al latín, lengua en la que se significó ignorante, apartado del conocimiento común. En la Edad Media se llamó idiota al clérigo que no sabía latín y de aquí a llamar idiotismo a la locución contraria a las reglas de la gramática propia y peculiar de una lengua.
.- Todos los capítulos de Tantos hombres y tan poco tiempo.