30 / jueves - abril de 2020

Semana 17. 121/245
Pío.

El verbo latino stupeo, stupere denotaba «estar (o quedar) inmovilizado, paralizado, entorpecido, congelado». Stupuerunt flumina bruma, decía el poeta épico Valerius Flaccus para significar «los ríos se congelaron con el frío». Los autores clásicos latinos hicieron metáforas en las que el entorpecimiento se convertía en admiración o encanto. Stupere in titulis, escribía Horacio con el sentido de «quedarse deslumbrado con los títulos». Ut terrae stupeant lucescere, decía Virgilio, para expresar cómo «la tierra se admira de ver lucir». Así el atontamiento de stupeo dejó su lugar al matiz de admiración y elogio que damos hoy a estupendo. El significado original se mantuvo, por cierto, en estúpido, procedente de latín stupidus, también oriundo del verbo stupeo.
.- Todos los capítulos de Tantos hombres y tan poco tiempo.