28 / miércoles - abril de 2021

Semana 17. 117/248
Prudencio.
Los objetos no tienen color, pero reflejan las distintas longitudes de onda de la luz. Esos reflejos diferentes son lo que nuestro cerebro percibe como colores. La razón de que haya tres primarios -rojo, verde y azul- responde a las características del ojo humano. Nuestras retinas poseen dos tipos de células fotorreceptoras: bastoncillos y conos. Las primeras trabajan cuando la iluminación es escasa; los conos, por su parte, se estimulan en entornos más iluminados y contienen tres tipos de fotopigmentos o moléculas detectoras de color, sensibles a las longitudes de onda del espectro de luz visible que llamamos rojo, verde y azul. El resto de los colores salen de las combinaciones del trío primario. Un ejemplo: si hay claridad, la luz reflejada por un limón estimula los conos rojos y verdes de la retina, que envían una señal al cerebro a través del nervio óptico. Las neuronas procesan el número de conos activados y la fuerza de su señal, y en este caso dictaminan que el resultado de esa combinación es el color que conocemos como amarillo.
.- Todos los capítulos de Tantos hombres y tan poco tiempo.